Germán Medina fue elegido por la mayoría de medios del país como el Entrenador del Año
Germán Medina es un hombre de retos. Dice que le agrada enfrentarlos de la mejor manera y más cuando se trata de buscar con sus bicicrosistas un título mundial para Colombia. El mejor técnico del año hizo para la Revista Mundo Ciclístico un balance de lo que fue la temporada 2016 y lo que será el 2017 para el BMX.
Paciencia y persistencia es lo que ha tenido Germán Medina. El entrenador este año llevó a Mariana Pajón a su segunda medalla de oro en unos olímpicos repitiendo lo sucedido cuatro años atrás en Londres. Igualmente en Río se logró la presea de bronce con Carlos Alberto Rodríguez, al igual que paso con Carlos Mario Oquendo en el 2012.
¿Ser elegido como el técnico del año que representa para usted?
“Me siento muy orgulloso. Fue algo muy especial que no me lo esperaba. Me siento orgulloso de ser colombiano y de llevar el BMX a otro plano, no solo en el país sino a nivel internacional. Esto nos obliga a trabajar más y buscar los objetivos trazados para el 2017. Ha valido la pena el sacrificio que se ha hecho como estar lejos de la familia y otras cosas”.
¿Justo reconocimiento a una labor realizada y que viene haciendo usted desde hace años?
“Estos triunfos en cabeza de una persona que lo recibe como lo hacen los deportistas cuando triunfan en cada una de las competencias que participan y logran éxitos, es gracias a varias personas y de mucha gente que me rodea y de aquellas personas que de una u otra manera colaboran para que todo se lleve al éxito. El reconocimiento hecho por El Diario El Espectador es uní personal, pero es para todas esas personas que están detrás apoyado esa causa, apoyando esos proyectos y no puedo dejar de lado los que considero fundamentales e importantes en esto que son pilares como mi esposa y mi hija”.
¿Cuál ha sido el día más feliz en su trabajo como seleccionador nacional y el más triste?
“Han sido muchos los días de alegría. A la vez se han tenido no días de tristeza sino de desconcierto ante algunas situaciones que se puedan presentar. Es difícil seleccionar uno pero si pudiese tener la oportunidad de hacerlo existen tres momentos muy importantes que fueron la final en Londres 2012, no solo por la medalla de oro de Mariana Pajón, sino por lo hecho por todos los deportistas y sobre todo por el momento histórico que se marcó en el deporte colombiano en donde el país recibió una medalla, que generó una cosa que nosotros nunca esperamos que se llegará a dar en el país y fue una locura. Cuando vi de la manera como se había celebrado la obtención de esa medalla quede sorprendido, eso para mí fue histórico. Pero es más histórico aún en el plano personal lo que pasó en Río. Uno de mis sueños era ver un estadio de BMX totalmente colmado como un estadio de fútbol, colmado de banderas de Colombia y donde se cantara nuestro himno nacional con todo el corazón. En Río vi mi sueño cumplido. Fue una gran energía la que sentí de la gente vestida de amarillo y apoyando a Mariana para ganar la medalla de oro y luego a Carlos Ramírez para obtener la presea de bronce”.
¿Se puede estar tranquilo frente al nuevo ciclo olímpico 2020 tanto en damas como en varones?
“Nunca estaremos tranquilos porque sabemos que todo mundo está trabajando para lograr el éxito y ser primeros. Cuando uno logra resultados como los que hemos tenido en Colombia nos hace aún más responsables y nos obliga a tener más compromisos. Una cosa es lograr resultados, pero otra más complicada es trabajar para obtenerlos. Nunca vamos a estar tranquilos, por el contrario vamos a estar cada vez más inquietos porque cada centésima de segundo y cada milésima que mejoremos es lo que nos va a asegurar poder mantenernos ahí. Son muchas horas de sudor, muchas horas de entrenamiento y muchas horas de esfuerzo. Estamos ahí comprometidos con la responsabilidad y no me dan miedo los retos, por el contario los asumo y por supuesto que queremos seguir para Tokio 2020 con todo el ánimo y con todo la responsabilidad de salir adelante”.
¿Cuál será su máxima expectativa para el 2017. Y en su agenda cuál será el verdadero objetivo?
“Inicialmente tenemos los Juegos Bolivarianos que tiene como sede a Santa Marta y donde queremos ser campeones. Este será uno de los grandes objetivos del 2017 junto con los campeonatos mundiales y panamericanos. Igualmente el mundial será en Estados Unidos y el panamericano en Bolivia. De manera que esos serán los tres objetivos fundamentales y principales. Aclarando también que el 2017 será un año de crecimiento donde debemos trabajar en algunas bases. Además debemos reforzar y mejorar con algunos deportistas para que Tokio sea nuevamente un éxito deportivo. Esperamos también contar con figuras de las categorías juveniles para lo que es necesario que apoyen ese proceso que viene”.
¿Cómo ha visto el trabajo que se hace a nivel de regiones en Colombia en el BMX?
Me tiene contento lo que viene haciendo el Valle en el bicicross. El esfuerzo de la región ha sido importante. Muchas personas han retomado este deporte. Existe un deportista muy importante y finalista en el campeonato mundial en junior que se llama Leonardo Arango, quien me parece una persona con una proyección muy interesante. Me parece que entre más regiones sigan con esos procesos, van a aportar mucho más para el beneficio de este deporte”.
¿Ya será hora de que alguien comience a promover la profesionalización del movimiento del BMX en Colombia, con la conformación de equipos y demás a nivel nacional?
“Hemos llevado un proceso y hemos ido abriendo un espacio ingresando a los Juegos Nacionales después ya hicimos parte del ciclo olímpico con Mariana Pajón y otros en Panamericanos, Centroamericanos y finalmente en los Olímpicos. El siguiente paso es profesionalizarlo, eso implica tener patrocinadores. No se puede olvidar que el deporte genera una cantidad de sentimientos que puede llevar a ser publicidad. Los deportistas se convierten en una marca. Todos los pequeños están con la ilusión de ser como Mariana Pajón, Carlos Ramírez y Carlos Mario Oquendo entre otros, por eso es importante en el deporte ver ídolos a los que se quiere emular. Todo debe tener su reconocimiento con los premios y de los títulos que logren para así poder vivir del BMX como lo hacen los grandes deportistas del mundo. En Colombia tenemos los ídolos, tenemos el material humano y ahora necesitamos liderar esos procesos. Esperamos personas que se den a la tarea y podamos llevarlos a cabo”.
Germán Medina es un hombre de retos. Dice que le agrada enfrentarlos de la mejor manera y más cuando se trata de buscar con sus bicicrosistas un título mundial para Colombia. El mejor técnico del año hizo para la Revista Mundo Ciclístico un balance de lo que fue la temporada 2016 y lo que será el 2017 para el BMX.
Paciencia y persistencia es lo que ha tenido Germán Medina. El entrenador este año llevó a Mariana Pajón a su segunda medalla de oro en unos olímpicos repitiendo lo sucedido cuatro años atrás en Londres. Igualmente en Río se logró la presea de bronce con Carlos Alberto Rodríguez, al igual que paso con Carlos Mario Oquendo en el 2012.
¿Ser elegido como el técnico del año que representa para usted?
“Me siento muy orgulloso. Fue algo muy especial que no me lo esperaba. Me siento orgulloso de ser colombiano y de llevar el BMX a otro plano, no solo en el país sino a nivel internacional. Esto nos obliga a trabajar más y buscar los objetivos trazados para el 2017. Ha valido la pena el sacrificio que se ha hecho como estar lejos de la familia y otras cosas”.
¿Justo reconocimiento a una labor realizada y que viene haciendo usted desde hace años?
“Estos triunfos en cabeza de una persona que lo recibe como lo hacen los deportistas cuando triunfan en cada una de las competencias que participan y logran éxitos, es gracias a varias personas y de mucha gente que me rodea y de aquellas personas que de una u otra manera colaboran para que todo se lleve al éxito. El reconocimiento hecho por El Diario El Espectador es uní personal, pero es para todas esas personas que están detrás apoyado esa causa, apoyando esos proyectos y no puedo dejar de lado los que considero fundamentales e importantes en esto que son pilares como mi esposa y mi hija”.
¿Cuál ha sido el día más feliz en su trabajo como seleccionador nacional y el más triste?
“Han sido muchos los días de alegría. A la vez se han tenido no días de tristeza sino de desconcierto ante algunas situaciones que se puedan presentar. Es difícil seleccionar uno pero si pudiese tener la oportunidad de hacerlo existen tres momentos muy importantes que fueron la final en Londres 2012, no solo por la medalla de oro de Mariana Pajón, sino por lo hecho por todos los deportistas y sobre todo por el momento histórico que se marcó en el deporte colombiano en donde el país recibió una medalla, que generó una cosa que nosotros nunca esperamos que se llegará a dar en el país y fue una locura. Cuando vi de la manera como se había celebrado la obtención de esa medalla quede sorprendido, eso para mí fue histórico. Pero es más histórico aún en el plano personal lo que pasó en Río. Uno de mis sueños era ver un estadio de BMX totalmente colmado como un estadio de fútbol, colmado de banderas de Colombia y donde se cantara nuestro himno nacional con todo el corazón. En Río vi mi sueño cumplido. Fue una gran energía la que sentí de la gente vestida de amarillo y apoyando a Mariana para ganar la medalla de oro y luego a Carlos Ramírez para obtener la presea de bronce”.
¿Se puede estar tranquilo frente al nuevo ciclo olímpico 2020 tanto en damas como en varones?
“Nunca estaremos tranquilos porque sabemos que todo mundo está trabajando para lograr el éxito y ser primeros. Cuando uno logra resultados como los que hemos tenido en Colombia nos hace aún más responsables y nos obliga a tener más compromisos. Una cosa es lograr resultados, pero otra más complicada es trabajar para obtenerlos. Nunca vamos a estar tranquilos, por el contrario vamos a estar cada vez más inquietos porque cada centésima de segundo y cada milésima que mejoremos es lo que nos va a asegurar poder mantenernos ahí. Son muchas horas de sudor, muchas horas de entrenamiento y muchas horas de esfuerzo. Estamos ahí comprometidos con la responsabilidad y no me dan miedo los retos, por el contario los asumo y por supuesto que queremos seguir para Tokio 2020 con todo el ánimo y con todo la responsabilidad de salir adelante”.
¿Cuál será su máxima expectativa para el 2017. Y en su agenda cuál será el verdadero objetivo?
“Inicialmente tenemos los Juegos Bolivarianos que tiene como sede a Santa Marta y donde queremos ser campeones. Este será uno de los grandes objetivos del 2017 junto con los campeonatos mundiales y panamericanos. Igualmente el mundial será en Estados Unidos y el panamericano en Bolivia. De manera que esos serán los tres objetivos fundamentales y principales. Aclarando también que el 2017 será un año de crecimiento donde debemos trabajar en algunas bases. Además debemos reforzar y mejorar con algunos deportistas para que Tokio sea nuevamente un éxito deportivo. Esperamos también contar con figuras de las categorías juveniles para lo que es necesario que apoyen ese proceso que viene”.
¿Cómo ha visto el trabajo que se hace a nivel de regiones en Colombia en el BMX?
Me tiene contento lo que viene haciendo el Valle en el bicicross. El esfuerzo de la región ha sido importante. Muchas personas han retomado este deporte. Existe un deportista muy importante y finalista en el campeonato mundial en junior que se llama Leonardo Arango, quien me parece una persona con una proyección muy interesante. Me parece que entre más regiones sigan con esos procesos, van a aportar mucho más para el beneficio de este deporte”.
¿Ya será hora de que alguien comience a promover la profesionalización del movimiento del BMX en Colombia, con la conformación de equipos y demás a nivel nacional?
“Hemos llevado un proceso y hemos ido abriendo un espacio ingresando a los Juegos Nacionales después ya hicimos parte del ciclo olímpico con Mariana Pajón y otros en Panamericanos, Centroamericanos y finalmente en los Olímpicos. El siguiente paso es profesionalizarlo, eso implica tener patrocinadores. No se puede olvidar que el deporte genera una cantidad de sentimientos que puede llevar a ser publicidad. Los deportistas se convierten en una marca. Todos los pequeños están con la ilusión de ser como Mariana Pajón, Carlos Ramírez y Carlos Mario Oquendo entre otros, por eso es importante en el deporte ver ídolos a los que se quiere emular. Todo debe tener su reconocimiento con los premios y de los títulos que logren para así poder vivir del BMX como lo hacen los grandes deportistas del mundo. En Colombia tenemos los ídolos, tenemos el material humano y ahora necesitamos liderar esos procesos. Esperamos personas que se den a la tarea y podamos llevarlos a cabo”.
Fuente: www.revistamundociclistico.com